• Pregunta: Hola Alberto, Desde pequeña me ha gustado la ciencia y siempre he tenido claro que me quiero dedicar a una de sus ramas en el futuro. Siempre he considerado la opción de estudiar la carrera de Medicina aunque nunca lo he tenido claro del todo ya que pienso que el contacto con los pacientes no es lo mio, aunque quizás si lo probase me gustaría. Lo que sí que me ha gustado siempre es la investigación y hace poco descubrí que existían las carreras de Biomedicina y Biotecnología. La verdad es que me llamaron bastante la atención ya que aunque están ciertamente relacionadas con la Medicina no tienes el contacto que te he mencionado anteriormente. He visto que tienes un Máster en Biomedicina Molecular y que trabajas en el Centro Nacional de Biotecnología, así que me sería de gran ayuda que pudieses contarme cómo es trabajar e investigar en esos ámbitos. Un saludo,

    Preguntado por anon-38022 a Alberto el 30 Abr 2020.
    • Foto: Alberto

      Alberto contestada el 30 Abr 2020:


      Hola Maribel!
      Me siento totalmente identificado con tu pregunta. Me acuerdo de aquel Alberto de 17 años, a pocas semanas de hacer los exámenes de selectividad y sin tener todavía claro cuál sería la carrera que iba a elegir. Medicina también era mi primera opción y muchos me animaban a seguir por ese camino, aunque finalmente (en un giro inesperado de los acontecimientos) no la escogí.
      En mi caso, la carrera que terminé (me gusta decirlo así porque también empecé Arquitectura y Química) fue Bioquímica y después hice un Máster en Biomedicina Molecular.
      El trabajo en investigación biomédica es muy bonito, gratificante y para nada monótono. Te permite seguir estudiando y aprendiendo cosas nuevas cada día, enfrentarte a retos día a día, conocer a mucha gente (tanto dentro como fuera del país) que comparte tus mismas inquietudes, y también sentirte útil para la sociedad.
      Por el contrario, también es un trabajo muy exigente. Normalmente, los científicos nos implicamos mucho en nuestro trabajo, y hay mucha competencia durante toda la carrera científica. Además, a veces nuestro trabajo está infravalorado por muchos sectores de la sociedad y la política.
      No obstante, yo soy de los que ven siempre el vaso mediolleno, y para mí pesan más las ventajas que los inconvenientes. Te animo a ir a por ello si verdaderamente te gusta la investigación!
      El día a día en un laboratorio es siempre diferente, pero básicamente consiste en: (1) leer mucho qué hacen otros científicos en sus laboratorios, qué técnicas utilizan y qué resultados obtienen, si son aplicables a tu proyecto o no, habrá días que exclusivamente te dediques a esta tarea: leer y estudiar; (2) plantear hipótesis y concretar cada una de las preguntas que quieres responder; (3) diseñar los experimentos necesarios para responder a esas preguntas, esta es una fase muy importante, creativa y en la que tienes que estrujarte los sesos para tener en cuenta todos factores que intervienen en el experimento; (4) llevar a cabo esos experimentos, para mi es lo más divertido, consiste en manipular y «cacharear» (como ves esta es solo una pequeña parte del trabajo aunque a veces, desde fuera, sea lo que se piensa que hacemos la mayor parte del tiempo); (5) analizar los datos y resultados obtenidos, la gran mayoria de las veces no obtienes los resultados que buscabas, hay fallos, necesitas repetir los experimentos porque los resultados son dudosos… Puede llegar a ser frustrante, pero descubriras que en el fracaso está el momento de mayor aprendizaje; (6) todo el trabajo llevado a cabo durante meses o incluso años, en su conjunto te dan una solución completa o parcial al problema/hipótesis que planteaste al inicio, y se incia el proceso de verter todo el trabajo en un artículo científico que será publicado: aquí el trabajo consiste en escribir, diseñar imágenes, gráficos y esquemas, responder a preguntas de editores y científicos que critican tu trabajo antes de la publicación… Por último, no nos podemos olvidar de toda la parte de comunicación: hay días en los que asistes a seminarios (y también los impartirás tú), reuniones y videoconferencias con otros compañeros, y pones en común de tus resultados y dificultades en la investigación con los miembros de tu laboratorio, o con científicos de todo el mundo en diferentes jornadas o congresos. También tienes la oportunidad de dar clases en la universidad y asistir a eventos de divulgación científica, más informales, tanto con personas adultas como jovénes y niños.
      Espero que, aunque haya sido una respuesta muy larga, te sirva para hacerte una idea!

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